Si bien no pudo conseguir la imágen con los gobernadores que esperaba remitirle al Fondo Monetario Internacional, Mauricio Macri podrá dormir tranquilo esta noche, a sabiendas de que la oposición dialoguista dio el visto bueno para aprobar el Presupuesto 2019. En una conferencia de prensa posterior al encuentro en Casa Rosada, el mandatario de Salta, Juan Manuel Urtubey, certificó el convenio conservador para complacer al organismo multilateral.

"Hay consenso en que Argentina debe tener una ley de presupuesto, que ese presupuesto debe ser con equilibrio primario y eso requiere el esfuerzo de todos: el sector público y el sector privado", aseveró Urtubey. Así, con la meta de que la variable gastos no vuelva a superar a la de ingresos, el peronismo le tendió la mano al Ejecutivo, en un recorte nacional que abarcará de mínima a $300 mil millones. 

Por la mañana, en la reunion que los jefes provinciales mantuvieron en el Consejo Federal de Inversiones, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, entregó finalmente las precisiones acerca de los objetivos económicos del año entrante: un tipo de cambio estabilizado en los $42, un índice inflacionario del 23% y un crecimiento económico nulo.

Con la promesa oficial de sostener la ayuda social, garantiza la oposición su apoyo al Presupuesto

Lo que ahora está en juego para el Gobierno, en un aspecto en el que está al borde del jaque mate, es su credibilidad. Hace exactamente un año, el equipo económico de Cambiemos presentaba el Presupuesto 2018, en el que preveía un incremento del PBI en un 3,5%, un aumento de precios cercano al 16% y un dólar a $19,30. Las impericias, tras el peor año de la gestión macrista, están a la vista de todos.

Dos corridas cambiarias, el retorno al financiamiento del FMI -que prestó US$ 50.000 millones y lejos estuvieron de abastecer las arcas del Estado- y un termómetro social sensible, que promete enardecerse con vistas a diciembre, derivaron en la coyuntura actual. "Yo no hubiera ido a acordar con el FMI", se distanció Urtubey, luego de sellar el contrato con el Ejecutivo. Y advirtió: "El acuerdo está planteado en que no haya reducción de las asignaciones, sino, no podríamos avalarlo".   

Alberto Weretilneck se expresó en la misma sintonía en Bella Tarde, garantizando las partidas para generar el menor impacto social posible. Por su parte, el gobernador de La Pampa, Carlos Verna, se posicionó contrario al ajuste y fue duro en su análisis con quienes apoyaron el proyecto de ley que Dujovne defenderá el lunes, en la Cámara de Diputados. "Hay gobernadores que están más cerca de Macri que de Perón", disparó.