Juntos por el Cambio atraviesa un período de reestructuración luego del resultado en las elecciones. Pero el golpe de Estado en Bolivia podrá haber adelantado los pasos: la posición sobre el estallido social en el país sudamericano generó diferencias entre los dirigentes que componen la alianza próximamente opositora.

El presidente de la Nación, Mauricio Macri, indicó este martes en conferencia de prensa que repudia "la violencia de cualquier tipo y bajo cualquier circunstancia", pero prefirió no calificar la situación de Bolivia como golpe de Estado. Y destacó que el "diálogo" debe ser el "mecanismo de salida".

Desde el domingo, el canciller Jorge Faurie fue el encargado de exponer la visión oficial del Gobierno, al asegurar que “no están los elementos para definir esto como un golpe de Estado”, según dijo en varias declaraciones a los medios. También aseguró que el comando militar “le sugirió” al presidente Evo Morales que renuncie a su cargo. Cabe destacar que el lunes por la noche, el jefe de las FF.AA Williams Kaliman decidió ejecutar “tareas conjuntas” con la policía de Bolivia en las calles de las principales ciudades.

Las voces disidentes partieron, en gran medida, desde la UCR. El partido radical, que compone la alianza de Cambiemos junto al Pro y la Coalición Cívica, emitió un comunicado en el que describe la dimisión de Evo Morales como "un golpe de Estado". El documento fue celebrado por el propio Alberto Fernández.

La tensión en Diputados

Con las firmas de gran parte del -futuro- bloque del Frente de Todos, este martes llegó a la mesa de entradas del presidente de Diputados, Emilio Monzó, un pedido especial para "repudiar el golpe en Bolivia". La cita será este miércoles y la expectativa pasa por saber, no sólo si el bloque de Juntos por el Cambio se va a presentar en la Cámara Baja, sino también -en caso de bajar al recinto- qué posición adoptará.

El jefe del bloque de la UCR, Mario Negri, repudió "la intromisión militar en la vida política de Bolivia" y tuiteó que aquella acción "sólo es compatibles con golpes de Estado".

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Otra voz disidente dentro de los legisladores de Cambiemos fue la de Daniel Lipovetzky, quien agradeció el reconocimiento de Alberto Fernández. "Que Alberto haya reconocido mi postura es orgullo", dijo luego de aclarar que "desde el primer momento no había duda que esto era un golpe de Estado".

Desde el bloque del Pro, en cambio, no se vislumbra si mantendrá la posición del canciller o se incorporan a la visión de la UCR. La única certeza es que a las 19 hora del martes, todo el interbloque de Cambiemos redactará un comunicado. El texto aún es una incógnita.