Sin embargo, la alegría duraría poco para el Xeneize. A los 33' del PT, apareció Nicolás Colazo adentro del área para validar la ley del ex. El actual jugador de Gimnasia no lo gritó y pidió perdón, pese a que no había hinchas de Boca -más allá de algún encubierto-. 

Colazo empató el partido

En el entretiempo, Boca entendió que no podía relajarse y que debía buscar volver a ponerse en ventaja para no terminar sufriendo en los últimos minutos. El Xeneize reaccionó a su estilo: sin generar chances claras y con poca profundidad, pero tuvo algunas situaciones y llegó al gol más por desacierto del rival que por virtud propia. Un error de Maximiliano Coronel permitió a Wanchope poner al Xeneize 2-1. El nueve robó la pelota y no falló el mano a mano.

Wanchope abrochó la Superliga

La ventaja parcial volvía a poner a Boca con dos goles de ventaja, ya que empatar también le aseguraba quedarse con la Superliga. El Xeneize siguió generando situaciones y estuvo cerca de estirar la ventaja, pero no lo consiguió y terminó sufriendo. A los 36' del ST, un remate de Braian Alemán que pegó en Lisandro Magallán se metió caminando ante un Agustín Rossi que había quedado a contrapié.

Alemán le puso suspenso

En los últimos minutos, pese a que un gol de Gimnasia reabría las esperanzas de Godoy Cruz, Boca se defendió bien y supo cuidar el empate. Sin jugar bien, pero con actitud, Boca se coronó campeón otra vez. El descanso será breve, el fin de semana irá con suplentes al cierre de la Superliga pero el miércoles tiene un duelo clave frente al débil Alianza Lima. Lo importante será lo que pase en Brasil, cuando Palmeieras se enfrente a Junior de Barranquilla.