Luego de un excepcional 2018 en el que conquistó la Champions League con el Real Madrid y llevó a la selección de Croacia a la final del mundo, Luka Modric se consagró como el nuevo Balón de Oro, al superar por amplia diferencia a Cristiano Ronaldo y Antoine Griezmann.

Pese a que era el favorito del público en las encuestas, la obtención del Mundial de Rusia con el conjunto francés y el título en la Europa League con el Atlético de Madrid no le alcanzaron a Griezmann para rebasar en votos al volante mixto del club merengue, que ya había obtenido en septiembre el premio The Best de la FIFA. 

Por otra parte, la consagración de Modric le puso fin a la dinastía de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, quienes se habían repartido en igual condición los últimos 10 reconocimientos individuales. Tras conocerse los resultados finales de la votación, el dato que sobresalió fue la posición en la que quedó el argentino: ubicado en el quinto lugar, es la primera vez desde el año 2006 que queda fuera del podio.

Si bien el rosarino se consagró como el goleador de la liga española, competencia que ganó con el Barcelona -al igual que la Copa del Rey-, su nulo aporte en la catastrófica derrota de su equipo ante la Roma en la Champions League, sumado a su exigua influencia para la selección nacional en Rusia, lo dejaron afuera de la carrera por la presea.

Por otra parte, la ceremonia de este año incluyó por primera vez el premio al fútbol femenino. La noruega Ada Hegerberg -23 años-, figura del Lyon francés, se quedó con el trofeo y agradeció a la revista France Football por la creación de la categoría femenina. "Es muy importante para nosotras", enfatizó.

En tanto, el promisorio Kylian Mbappé se quedó, de manera previsible, con el premio al mejor jugador Sub 21. A sus 19 años, el francés ya se coronó como campeón mundial -convirtió un gol en la final-. Además, el delantero del Paris Saint Germain quedó en el cuarto lugar de la votación general.