Aprovecha la crisis Pérez Companc y adquiere cinco empresas extranjeras por US$250 millones
La firma estadounidense General Mills, dueña de La Salteña, ya colocó el cartel de venta de su firma y el grupo Pérez Companc es el principal candidato para adquirir los activos.
Producto de la caída del consumo y la recesión, los dueños de General Mills decidieron desprenderse de sus activos y seguir el camino que iniciaron en 2015, cuando se desprendieron de Bimbo.
Pérez Companc, el holding familiar dueño de Molinos Río de la Plata, que también expresó pérdidas en su compañía, ya avanzó para poder concretar la compra de La Salteña. Aunque ya cuentan con las marcas Luchetti, Matarazzo, Delverde, Don Vicente y Don Felipe, con la nueva adquisición podrían ingresar en una nueva categoría de tapas para tartas y empanadas.
Pérez Companc, que además de Molinos Río de la Plata posee Molinos Agro y Bodegas Nieto Senetiner, se encuentra en camino de expandir aún más su negocio energético.
A través de PeCom Servicios Energía, en noviembre pasado el grupo compró por US$150 millones la empresa de servicios petroleros Bolland, la cual se sumó a Tel3, otra firma del holding, por la cual pagó US$33 millones en el último agosto.
Como si fuera poco, en los primero días de enero, Pérez Companc adquirió el 33% del holding español Patagonia Bioenergía, cuya planta de biodiesel es un servicio agregado para el aceite de soja.
Durante los primeros días, la compañía también compró por US$35 millones las acciones que le faltaban del frigorífico uruguayo San Jacinto. De cara al futuro, el holding anhela quedarse con el 50% de las acciones que el Estado nacional posee de Transener.
En paralelo, y también producto de la crisis, la firma brasileña agroalimentaria BRF terminó de desprenderse de sus activos en la Argentina. Campo Austral, Calchaqui y Bocatti eran las marcas que integraban la compañía y solo la primera fue vendida a las empresas nacionales Bogs y La Piamontesa.
Por un total de 35,5 millones de dólares se completó la venta de Campo Austral que involucra a tres fábricas ubicadas en el conurbano bonaerense y que cuenta actualmente con 1200 empleados en planta.
Calchaqui y Bocatti no corrieron la misma suerte y continúan el camino de desinversión de la compañía, que comenzó con la venta de Avex y Quickfood. El proceso de venta que alcanzó los 145,5 millones de dólares en activos, es un ejemplo de lo que ocurre con el la actualidad económica en la que no solo las pymes se ven afectadas sino también las grandes compañías.
