El escenario para el Gobierno es bien incómodo. La gran chance que tenían de convertir en ley la reforma previsional quedó postergada. Y ahora aparecen varios frentes para el espacio Cambiemos y su intención de sacar cuanto antes el proyecto que modifica los haberes jubilatorios.

“La semana que viene la vamos a aprobar”. Con esa frase, Lilita Carrió dejó clara las intenciones del Ejecutivo de avanzar entre miércoles y jueves de la próxima semana para darle luz verde a la reforma que quiere Macri.

Sin embargo, la gran duda se origina en si el Gobierno contará con el quórum (el oficialismo afirmaba que hoy le alcanzaban los votos) para comenzar el debate.

"La semana que viene vamos a aprobar la reforma previsional", dijo Carrió

Luego, claro el macrismo deberá conseguir los 140 votos que, aparentemente, los tendría confirmados entre diputados del peronismo disidente y otros espacios opositores.

El problema más grande para el oficialismo, igual, radica en la posibilidad de que se caiga todo el paquete de leyes que tenían previsto aprobar antes de fin de año.  ¿Por qué? Desde la Casa Rosada habían acordado con los gobernadores y diputados que la primera ley que había que aprobar antes de la reforma tributaria y fiscal era la previsional.

Ahora, con la agenda alterada y los ánimos caldeados, deberán definir los jefes de los diferentes bloques el esquema que armarán para dos semanas calientes que tendrá el Congreso antes del 2018.