El delito en la provincia de Buenos Aires no ha tenido tregua en el 2020, más allá de que durante siete meses y medio el distrito transitó su día a día en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio, lo que podría haber insinuado una disminución en sus distintas modalidades. Si bien durante el período de abril a agosto cayó un 24,6% la cantidad de delitos denunciados, crecieron los homicidios en ocasión de robo, las entraderas y las denuncias por robos violentos de motochorros.

Según datos consignados por el Ministerio de Seguridad que conduce Sergio Berni, entre los meses de la pandemia, comparado con el mismo período de 2019, los robos violentos protagonizados por motochorros aumentaron un 25,3% y las entraderas un 17%. En los primeros seis meses del año los asesinatos por robar crecieron 58% interanual. Y el abuso de armas de fuego para llevar a cabo un ilícito se incrementó 10%.

Otros datos alarmantes: de acuerdo a las estadísticas del Ministerio Público Fiscal bonaerense, ascendieron en 3,5% los homicidios protagonizados por menores de edad, 65% los delitos de menores con uso de armas de fuego y 66,6% las causas abiertas a menores de edad por haber participado de una estafa. Hay chicos menores de 10 años que ya han delinquido en más de una oportunidad. Además, subieron en 10% los delitos contra la integridad sexual.

El último informe de la Procuración que llegó al escritorio de Axel Kicillof reflejó un descenso del delito en la Provincia durante la etapa más rígida de la cuarentena. Entre el 20 y el 31 de marzo de este año, la caída fue del 56,3% en relación al mismo período de 2019; en el mes de abril, la disminución fue del 45,3%. Mayo presentó una baja del 25,2% y junio, de apenas 17,3%.

¿En números? Mientras que en abril se registraron 35.000 investigaciones penales preparatorias menos (IPPs) si se las compara con las cifras del año anterior, en junio esa brecha positiva se redujo a 10.500 IPPs. En los primeros 180 días de 2019 se abrieron 247.708 IPP, contra los 164.932 del primer semestre de 2020.

Desde el Ministerio Público Fiscal indicaron a este medio que, año a año, las IPPs crecen en línea con el aumento poblacional del distrito más populoso de la Argentina. “Si se agranda la población, el número de delitos en proporción a los habitantes se incrementa”, reflexionan. En este sentido, afirman que el alza de las IPPs todos los años oscila el 6% y lo normal sería ver un incremento de las mismas al final de 2020. El descenso de los guarismos en estos meses, entonces, obedeció únicamente a la instauración del aislamiento social.

En lo que respecta a femicidios y delitos intrafamiliares, el encierro ha agravado el escenario. El relevamiento elaborado por el Registro Penal de Violencia Familiar y de Género del Ministerio Público de la provincia de Buenos Aires (REVIFAG) informó que en el primer semestre del año, 56 mujeres murieron a raíz de la violencia machista (33 durante el período ASPO), contra 48 que fueron asesinadas en el mismo período de 2020. Del total, 47 femicidios fueron provocados en una vivienda (83,9%), un 43% se perpetraron entre las 00:00 y las 06:00 de la madrugada y el 32% de los victimarios utilizó un arma blanca.