Hace 17 años que ocupa la misma banca en el Senado pero hoy su lugar peligra: alejado del oficialismo que encabeza el gobernador Alberto Weretilneck -cercano a Cambiemos- y de la fuerza peronista que lidera Martín Soria -alineado al kirchnerismo y lejano a la propuesta federal de los dialoguistas-, Miguel Ángel Pichetto no tiene una lista ni los votos para renovar el asiento que ocupa hace casi dos décadas. Con una mejor imagen nacional que en su propio distrito, el senador por Río Negro se sube a la arena para pelear por una candidatura presidencial que compita contra Mauricio Macri el año que viene.

Pichetto perdió dos veces la elección a gobernador de Río Negro (2007 y 2015). En la última, Weretilneck, que en su condición de vice asumió la gobernación tras el asesinato de Carlos Soria, lo venció por casi el 20% de los votos y se especuló un fin de la carrera política del peronista que ahora busca una revancha a nivel nacional.